Esta semana conocí a una chica que trabaja en uno de las principales entidades financieras del país, y además, da clases de en la universidad.
Este sábado estaba invitado como oyente a una de sus clases para familiarizarme con el modo de comunicar, cómo tratar al público dominicano y hacerme un poco la idea cómo afrontar aquí futuras charlas que tenemos pendientes en distintos congresos, seminarios, etc.
La clase ha sido para alumnos de postgrado de Administración y Finanzas. Han sido un par de horas muy ilustrativas, en las que he tenido la oportunidad de mezclarme y empaparme con su jerga, tecnicismo y anglicismos (ver más notas de vocabularios en la etiqueta vocabulario...).
Tras la clase, hemos ido a un Car Wash a lavar su coche; todo un evento social. Recintos enormes dedicados a este cometido: te recepcionan el coche, te dan un ticket y a disfrutar de la tarde; bar, restaurante, billares, e incluso una atracción para perfeccionar tu "hit", una máquina que te lanza bolas para que tú las golpees con un bate de base-ball (veisbol, pelota, hay para todos señores).
Pero lo mejor de la tarde, sin duda, Víctor Manuel; de repente, entre tanta música latina, se oye a todo volumen "Asturias, patria querida", interpretada magistralmente en un directo de Víctor Manuel.
Inevitablemente, me vino a la cabeza la última vez que oí esta canción entonada por una panda de asturianos ebrios, pero eso sí, muy unidos; eso fue en la boda de Javi.
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